Como en su momento fueron The Beatles, Nirvana, Michael Jackson o Justin Bieber, hoy en día tenemos una nueva voz que representa a esta nueva generación. No es nada más ni nada menos que Billie Eilish, adolescente de 17 años nacida en Los Ángeles, California, en Estados Unidos.
¿Pero que hace tan especial a Billie Eilish entre toda la música del mundo? Es verdad que con el avance de la tecnología, hoy en día es más fácil hacer música desde casa, y que todo el mundo pueda hacerla. Pero Billie, junto a su hermano Finneas O’Connell, lograron resaltar en todo el resto, y sin la presión de una discográfica en cumplir con las normas y reglas para romper récords en la música comercial, ellos optaron por elegir el silencio entre tanto ruido. “When We All Fall Asleep, Where Do We Go?” es el álbum debut de la cantante, que sorprendió totalmente a la audiencia y no tardó en ser top en el mundo. Hablando de drogas en tus amigos, el amor no correspondido, relaciones tóxicas, el deseo de pertenecer, y el mismo deseo de a veces no pertenecer a este mundo.
¿Te suena haberlo escuchado? Tal vez si, o tal vez no tan real como lo cuenta Billie. Hoy, estas realidades tienen voz y melodía. A lo largo de los años, la música ha subido su volumen, y para más alcance se necesita llamar la atención del oyente, haciendo cada vez más estruendo. Pero los hermanos O’Connell no necesitaron más que un piano, beats y la voz de Billie para ser número 1 en todo el mundo desde la comodidad de su casa.
Además de tener una voz suave al estilo indie girl, al mismo tiempo grave e imponente como para acogerte y trasladarte a lo largo de una canción, Billie Eilish tiene un estilo único, buzos grandes y pantalones holgados, son todo lo contrario a lo que llevaría un icono pop femenino hace diez años atrás. O un poco menos. Carismática y agradable, como es con sus fans y los medios que se acercan a ella, también tiene pensamientos y discursos súper importantes que no dan lugar a la invisibilidad de situaciones reales que se dan en el mundo y en cada persona que habita en él.
Billie reveló en su cuenta de Instagram que sufre de síndrome de Tourette, enfermedad que recién se está haciendo visible en estos tiempos, aunque existió desde siempre. Ella dice: “Nunca lo mencioné en internet porque nadie me cree, y no quería que la gente pensara en el tourette cada vez que piensan en mí”. Pero esto no impidió que hiciera música, ni que callara a la hora de decir algo. Billie tiene que decir, y tiene con que hacerlo.
La generación de hoy en día se encuentra en una catarsis mundial de cambios y realidades que se desmantelan todos los días, dando lugar a conocer que cada persona es distinta y tiene sus problemas. La depresión, la ansiedad, los pensamientos suicidas, y las enfermedades mentales son una realidad, pasan cada día, y habitan en la gente que nos rodea. No hay que ignorarlo. Un poco es lo que canta Billie, por lo tanto es la voz de esta generación. De aquellos que creyeron que su mente no es importante, ella canta en melodías y sonidos agradables, que no hay que subestimar a los adolescentes, no son etapas ni rebeldías, son el presente del futuro. Y no hay que ignorarlos.
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