Tras casi 30 años de carrera, Cannibal Corpse siguen siendo una de las bandas más representativas del Death Metal. Durante toda su trayectoria han seguido fieles a su estilo, creando una gran cantidad de trabajos discográficos y ofreciendo a sus seguidores extensas giras por todo el mundo.
A diferencia de las bandas comerciales, Cannibal Corpse no es de esas bandas que haya contado con gran apoyo en las radios o en la televisión. Su éxito se ha basado principalmente en el boca a boca, y, a pesar de que en muchos países han sido vetados por las portadas de sus discos y sus letras, hoy en día siguen siendo unas auténticas estrellas de este género musical.
Seguramente hayáis visto u os suene su logotipo, un claro reflejo del estilo y visión propia de la banda, algo de lo que la banda se siente muy orgullosa, y un icono que los identifica como banda. Hoy veremos cómo fueron los primeros pasos de la banda, haremos un recorrido por su extensa discografía y, además, os daremos los detalles del último trabajo de la banda, Violence Unimagined, publicado en abril de este mismo año 2021. Id calentando cervicales que empezamos!
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Cannibal Corpse, iconos del Death Metal
El bajista de la banda y uno de sus fundadores, Alex Webster, propuso el nombre de Cannibal Corpse para la banda, y al resto de los miembros de la formación, Chris Barnes, Jack Owen, Bob Rusay y Paul Mazurkiewick, aceptaron de buen grado este nombre. Todos procedían de otras bandas, y fue en el año 88 en la ciudad de Búfalo (situada en el estado de Nueva York) cuando la banda toma forma.
El logotipo de Cannibal Corpse, con colores predominantes en sus letras en rojo y negro, aparece en todos sus discos, y se ha convertido en todo un símbolo que representa a la perfección tanto las letras como la música de la propia banda.
Como ya os hemos comentado al comienzo de este artículo, la banda se ha convertido con el tiempo en una de las agrupaciones con mayor éxito y con una extensa trayectoria que pocas bandas de este estilo han logrado superar. Han vendido más de un millón de copias de sus discos por todo el mundo, y tienen mucho mérito al conseguirlo sin contar con el apoyo de las radios ni las televisiones, algo de lo que pocas bandas puedan presumir.
Cannibal Corpse son un icono del Death Metal, y sus temas con voces guturales, tempos rápidos e increíbles riffs de guitarras hacen que podamos reconocerlos, además, claro, de las portadas de sus discos, que cuentan siempre grafismos y temáticas relacionadas con la violencia o el sexo.
Desde que Cannibal Corpse aparecieran en escena, fueron muchas las bandas que bebieron de su estilo, aunque un tanto más sutiles. Sin embargo, Cannibal Corpse no entiende de sutilezas, y quizás por ello son considerados como una de las bandas pioneras del Brutal Death Metal, un estilo un tanto más agresivo y más rápido que el ya mencionado Death Metal.
La primera actuación de Cannibal Corpse data del año 89, un año después de su creación y con tan solo una demo a sus espaldas. Tras un año de ese concierto, la banda consigue firmar un contrato discográfico que les permitió sacar a la luz su primer larga duración, un disco llamado Eaten Back to Life que fue publicado en los 90.
En esta carta de presentación, Cannibal Corpse nos muestra una buena descarga de furia con machacantes riffs de guitarras, y las voces guturales de su cantante por aquel entonces Chris Barnes. Temas como Mangled, Bloody Chunks o Buried In the Backyard son una clara muestra de ello, y eso por nombrar algunos temas, pues el disco sigue la línea de estos temas que no os dejarán respirar.
Con este primer trabajo, la banda consiguió un éxito arrollador y que sus fans comenzaran a crecer a lo largo y ancho de todo el planeta. Y empezaron pronto a levantar ampollas entre la crítica, siendo censurados en Alemania por la portada de este primer disco (en la que se mostraba a un zombie abriéndose en canal y mostrando sus entrañas) y por el contenido de sus letras. Eso sí, se podía comprar una versión censurada de este disco.
También crearon polémica por la dedicatoria que aparecía en este disco, una dedicatoria a uno de los primeros caníbales americanos. Si es que… estos Cannibal se lo van buscando.
Al año siguiente, y tras seis meses de duro trabajo en el estudio de grabación, publican un nuevo trabajo llamado Butchered at Bird. De nuevo, la crítica y la polémica estaban servidas con las letras de los temas de este trabajo, y, cómo no, de la controvertida portada del disco, en la que aparecía un zombi amputando a una madre y otro zombi que sujeta a un bebé prematuro. Por si fuera poco, detrás de esta imagen aparecen numerosos fetos muertos.
Para rizar el rizo, el título del disco estaba escrito con tinta roja (simulando la sangre), y las primeras copias de este trabajo estaban envueltas en papel de estraza, ese clásico papel que utilizan en las carnicerías para envolver la carne. De nuevo se ganaron que en Alemania se prohibiera la venta de este trabajo.
En este trabajo, Cannibal Corpse contó con la colaboración de Glen Benton, cantante y frontman de la banda Deicide, en el tema Vomit The Soul.
Tras este trabajo, la banda sigue trabajando, y en el año 94 publican The Bleeding, el primer trabajo del nuevo guitarrista de la formación, Rob Barret, y el último trabajo en el que Cannibal Corpse contaría con Chris Barnes como vocalista. Este trabajo afianza la posición de la banda como los líderes de la escena de este género musical, en el que nuevamente superan con creces el listón de sus anteriores trabajos publicados.
Tras la salida de Chris Barnes de Cannibal Corpse, la banda ficha a George Fisher, y con él como vocalista sale a la luz en el 96 su trabajo Vile. Este disco consiguió posicionarse en los primeros puestos de las listas de ventas de Estados Unidos.
Uno de los temas más representivos de este trabajo, y que también marca la portada Mummified in Barbed Wire, portada en la que también podemos ver un ligero cambio en su logotipo. La banda tuvo que cambiarlo, ya que los derechos de su anterior logotipo pertenecían a su anterior cantante Chris Barnes.
Dos años más tarde, en el 98, publican Gallery Of Suicide, quizás el trabajo más experimental de la banda en el que encontramos un cambio en el sonido al que nos tenían acostumbrados, pues este disco es más melódico que sus anteriores discos. En el 99 publican Bloodthrist, un disco considerado por los seguidores de Cannibal Corpse como el regreso de la banda a esa brutalidad sonora que les caracteriza.
Una vez más, la portada de este trabajo vuelve a ser censurada, modificando la imagen original en la que aparecía una criatura que devoraba a un hombre que aparecía sobre una pila de huesos. Este grafismo es la representación de uno de los temas que se incluyen en este trabajo, un tema titulado The Spine Splitter.
Cannibal Corpse y el nuevo milenio
Con el comienzo del nuevo milenio, Cannibal Corpse sigue con su producción de trabajos discográficos, y en el 2002 sale a la luz Gore Obssesed. Este disco se presentaba dentro de una funda negra por la portada del disco, que al parecer es bastante desagradable y que representa la canción incluída en este trabajo, Pit of Zombies. En este trabajo también se incluye una versión del tema No Remorse de Metallica.
Con cada trabajo, Cannibal Corpse se superaban a sí mismos, y una vez más lo demuestran con un nuevo trabajo publicado en 2004, su disco The Wretched Spawn. Un trabajo mucho más veloz que sus anteriores discos, y cargado de un técnico y poderoso Death Metal, todo lo que esperaban y deseaban sus fans.
Este trabajo es una buena bofetada con la mano bien abierta de una ferocidad y brutalidad que solo Cannibal Corpse saben hacer, un disco cargado de alternaciones de ritmos y tiempos que hizo que la banda se hiciera con muy buenas críticas. Aquí os dejamos uno de estos temas, Severed Head Stoning, a modo de ejemplo.
Los de Búfalo seguían imparables demostrando a sus fans que eran los reyes del Death Metal y del Brutal Death Metal, y vuelven con un nuevo trabajo en el 2006 con un título muy al estilo de Cannibal Corpse, un álbum llamado Kill.
En este trabajo encontramos nuevamente la colaboración estelar de Rob Barrett, que ya había trabajado con la banda en algunos trabajos. Este trabajo contó con una versión especial que se publicaría sólo en Europa que contenía un DVD en el que la banda incluyó el show que dieron en Estrasburgo dos años antes de la publicación de este trabajo.
2009 y 2012 fueron los años en los que Cannibal Corpse publicaron sus siguientes trabajos, Evisceration Plague y Torture respectivamente. Vuelven a ser el centro de atención de todas las críticas por la visceralidad y violencia de sus portadas, algo que ya venía siendo habitual en la banda desde sus comienzos, y a lo que ya debían estar acostumbrados.
En cada trabajo la banda subía el nivel intentando hacerlo mejor en cada disco, siempre intentando llegar aún más lejos. Dos años después de la publicación de Torture, llegó A Skeletal Domain, y ya os podéis hacer una idea de cómo era la portada con este título: esqueletos, huesos, calaveras, y 12 temazos con letras muy violentas al más puro estilo de Cannibal Corpse.
Cannibal Corpse no permanecía mucho tiempo en silencio, aunque tres años quizás era mucho tiempo para los fans más exigentes. No hiceron esperar más a sus seguidores, y así, en 2017, vuelven con un nuevo trabajo titulado Red Before Black, un disco con el que no defraudaron.
En este álbum siguen la línea Death Metal de sus anteriores discos, con riffs cercanos al Thrash, mucho groove y ese salvajismo que siempre les ha caracterizado. Las críticas fueron por lo general bastante buenas, aunque para muchos quizás no era el mejor trabajo de la banda en comparación con sus anteriores discos.
Como dato curioso podemos deciros que, después de escuchar la canción Only One Will Die, escrita por el bajista Alex Webster, todos los miembros de la banda pensaron que debería ser la primera pista del álbum.
Violence Unimagined, el último trabajo de Cannibal Corpse
Cannibal Corpse, a pesar de algunos y puntuales cambios en la formación, ha sido siempre una banda bastante estable, pero en el 2018 esa estabilidad estuvo a punto de venirse abajo y echar al traste todo el camino que Cannibal Corpse había recorrido hasta el momento. Y todo porque a Pat O’Brian, guitarrista de la banda, se le fue la olla cuando le metió fuego a su casa en la que además tenía todo un arsenal de armas.
No contento con ello, con meterle fuego a su propia casa, asaltó la casa de unos vecinos que vieron claramente que este hombre no estaba bien, vamos, que estaba loco. Pat fue arrestado y, como es evidente, el resto de los componentes de Cannibal Corpse no quisieron saber nada más de él.
Como Pat ya no formaría parte de la banda, hubo que buscar un sustituto y decidieron contar con Erik Rutan, que, además de ser el habitual productor de la banda, también había tocado con ellos en algunos directos. Erik era prácticamente uno más de la familia Cannibal Corpse, y apenas tuvo que esforzarse para encajar. De hecho, se nota, y bastante, su entrada en la formación, pues con él la banda publica uno de los mejores discos de los últimos años, Violence Unimagined.
Este nuevo trabajo de la banda nos demuestra que Cannibal Corpse no han perdido el tiempo durante la pandemia del Covid19. Publicado en abril de este mismo año 2021, Violence Unimagined nos ofrece una increíble interpretación de los cinco componentes de la formación con brutales riffs de guitarras con muchos matices, y una ejecución muy precisa, y, como no podía faltar en un trabajo de Cannibal Corpse, esa agresividad a la que nos tienen acostumbrados (o no).
En unas recientes declaraciones realizadas por el bajista de la banda, Alex Webster, afirmaba que una de las mayores diferencias de este trabajo es sin duda la incorporación de Erik a la formación, ya que le ha dado su particular toque y estilo a este disco, pues ha escrito y compuesto la letra y la música de tres temas de este nuevo trabajo.
En los 43 minutos que dura este trabajo incluyeron temas en los que encontramos ese Death Metal y Thrash clásicos de la banda, como pueden ser Follow The Blood, Condemnation Contagion o Murderous Rampage entre otros. Pero también tenemos algunos temas para rompernos las cervicales, como pueden ser Slowly Sawn, Inhuman Harvest o Fisher entre otros.
Por supuesto, la portada de este disco es igual o más desagradable que la de sus anteriores trabajos publicados. En Violence Unimagined nos encontramos con una portada en la que podemos observar a una horrible y sangrienta madre con unos afilados y monstruosos dientes, devorando a su hijo. Brutal! Como la banda está ya acostumbrada a la censura, decidieron hacer otra portada complementaria para que el disco se pudiera lanzar de manera más amplia.
Cannibal Corpse han vuelto a hacerlo, se han vuelto a superar con este excelente trabajo que ha obtenido muy buenas críticas por parte de la prensa especializada, y sobre todo por sus fans. Un disco muy fluido, muy variado sin perder ese sonido que siempre les ha acompañado, y con el que demuestran una vez más que son una de las mejores bandas de Death Metal.
Cannibal Corpse, prohibidos y censurados
Desde que Cannibal Corpse comenzó su carrera musical, y tal y como os hemos venido contando a lo largo de estas líneas, han sido censurados en muchos países, entre ellos Alemania, Corea, Australia, Nueva Zelanda, Rusia…
Pero el que fueran censurados y prohibidos en algunos países no fue ningún impedimento para que Cannibal Corpse se convirtiera en una banda de éxito. De hecho, cuentan con disco de platino por las ventas de sus discos, y con un buen número de leales fans posicionándose como una de las bandas más representativas del Death Metal.
Siempre han sido criticados por sus agresivas y violentas letras, además de por las portadas de sus discos, sobre todo en Estados Unidos, donde existen varios grupos autodenominados como «policía moral» que les hacían la vida imposible. Pero Cannibal Corpse, a pesar de los ataques recibidos por parte de estas asociaciones, siguió apareciendo en las portadas y entrevistas de los medios de comunicación, vendiendo millones de discos, dando giras interminables a lo largo y ancho del planeta, y todo ello sin aparecer en la radios y en los medios más comerciales.
Si bien es cierto que en muchos países donde estuvo prohibida la venta y reproducción de sus discos hoy en día la situación ha cambiado, también lo es que siguen estando vetados en Rusia, por ejemplo, donde está totalmente prohibido tanto la reproducción de cualquier grafismo de la banda como la traducción de sus letras. Por si no lo sabíais, de la gira que dieron en Rusia en 2014, en la que darían 8 conciertos, finalmente sólo dieron 2, el resto fueron cancelados. En otros países, por poneros otro ejemplo, si no sois mayores de edad no podréis comprar ningún disco de la banda.
Cannibal Corpse no van a cambiar, pues tanto sus letras, su sonido y las portadas de sus discos son sus señas de identidad. Ya habéis visto que a pesar de la censura que han sufrido (y sufren) la banda son ya unos verdaderos iconos del Death Metal. No habrá censura que pare a Cannibal Corpse.
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