Paul McCartney dio una sorpresa a todo el mundo cuando en el programa de televisión The Jonathan Ross Show recordó el instante en el que descubrió que su amigo John Lennon,había muerto de un disparo en Nueva York a la salida de su casa. Aunque han pasado ya 34 años de este desgraciado asesinato, las palabras de McCartney estaban llenas de sentimiento.
El artista indicó que se encontraba en su casa cuando recibió una llamada de teléfono bien temprano, y que no podía creerlo, hablara con quien hablara nadie podía creerlo. Esta sensación de irrealidad duró durante semanas, sin poder hacerte a la idea de que John se había ido. McCartney contó al presentador del programa que fue un gran shock, y que fue muy difícil contarselo a su mujer y a sus hijos. El shock fue enorme ya que John tenía relación con muchas personas de muy distintos sectores de la población, pudiéndose comparar en algunos momentos con la repercusión que tuvo el asesinato de Kennedy.
Hablaron amigablemente sobre detalles de aquella trágica experiencia, destacando el momento en que de Paul McCartney dijo que lo peor de todo es que si veías a su asesino, la persona que le quitó la vida, todo el mundo pensaría que ese tío es un auténtico capullo, ni siquiera era una persona motivada políticamente ni nada.
También hablaron de la vez que McCartney no pudo reprimir el impulso de rememorar la famosa portada de Abbey Road, donde los Beatles cruzaban la calle por el paso de peatones. El artista indicó que siempre quería hacerlo, y que incluso alguna vez ha bromeado cuando se encontraba a miriadas de turistas japoneses con colarse en la foto, pero sólo ocurrió una noche de Halloween, sobre las 23h de la noche, y lo hizo con una máscara de lobo en la cabeza.
