Aún así, el tenor dice sentir «suficiente entusiasmo» como para seguir sobre el escenario con la «locura de la música» mientras le respete la salud.
El tenor y director artístico Plácido Domingo ha confesado este miércoles que atraviesa unos «momentos difíciles» marcados por el reciente fallecimiento de su única hermana, pero siente «suficiente entusiasmo» como para seguir sobre el escenario con la «locura de la música» hasta que se lo permita la salud.
Así lo ha expresado Domingo, de 74 años, en la rueda de prensa que ha ofrecido junto Davide Livermore, intendente del Palau de Les Arts Reina Sofía de Valencia, auditorio en el que inaugurará la próxima temporada de abono con Macbeth, de Verdi, y con el que está «en conversaciones» para dirigir próximamente alguna obra.
El artista ha destacado que el «entusiasmo» que siente por la «mezcla de locura y enfermedad» que para él encarna la música le lleva a seguir actuando «hasta que aguante» su voz y el público vaya a los teatros a verle actuar, aunque ha recalcado que sabrá «irse a tiempo».
Mientras tanto, tratará de «buscar una solución» que se puede traducir en, tras tantos años de cantar de tenor, actuar con repertorio de barítono, y para cuando baje de los escenarios, se plantea dirigir y enseñar, aunque no hace «planes a largo plazo» porque no sabe hasta cuándo continuará.
Los «meses más difíciles» de su vida
Tras los «meses más difíciles» de su vida por salud y la muerte de su hermana, a la que estaba «muy unido», unas circunstancias que le han hecho cancelar siete funciones, entiende que «hay que seguir adelante» y no encuentra «mejor camino para ello» que el mundo de la música, que le «distrae» y mantiene «la mente siempre activa«.
En sus próximos años, ha confiado en seguir actuando en escenarios de todo el mundo y continuar su tarea en el Palau de Les Arts, donde, además de actuar, dirige el Centre de Perfeccionament de artistas que lleva su nombre, y que esta tarde elige, entre 34 finalistas de 146 participantes, a los 13 candidatos de la séptima promoción de esta «maravillosa» iniciativa que prepara «futuras estrellas».
El tenor madrileño ha transmitido su «ilusión» de que el nuevo conseller de Cultura del Gobierno valenciano, de reciente nombramiento, «se dé cuenta de lo que tiene» con este auditorio, con el que se ha deshecho en halagos por su contribución a la música y con el que supone «un placer» seguir trabajando.
Sobre la temporada del Palau de Les Arts que se inaugura el próximo otoño, que le llevará en diciembre ha interpretar Macbeth, de Verdi, ha valorado un «completo» programa que incluye espectáculos de ópera, danza, conciertos y recitales «e, incluso, un género a veces maltratado como el de la zarzuela».
Por su parte, el director artístico del auditorio, Davide Livermore, ha desgranado el repertorio «para todos los gustos» propuesto para esta temporada, que arranca en diciembre y que incluye desde las óperas de Verdi Macbeth y Aida, Samson et Dalila, de Saint-Saëns, y la obra Idomeneo, de Mozart, hasta espectáculos de danza como el Don Quijote de Minkus y diferentes conciertos y recitales.
Del mismo modo, se ha referido a una pretemporada que se inicia en octubre y que cuenta con la zarzuela Katiuska, de Pablo Sorozábal, el concierto-espectáculo Léio, de Hector Berlioz, y el recital conmemorativo del décimo aniversario del Palau de la mano de Davidde Penitente, de Mozart, entre otros.
Esta entrada se publicó primero aquí por EFE
