por Ana Peláez Lara.
Como cada año, el Frank Rock&Blues Festival ha inundado de rock y blues Torreperogil. Este fin de semana se ha celebrado la XVII edición de un festival consolidado, cuyo nombre se debe a uno de los artífices que dio lugar a esta iniciativa y que falleció hace ya casi nueve años: Frank Peláez.
Por primera vez, la celebración del festival se ha dividido en dos días de actuaciones en el marco incomparable del Auditorio “Torres Oscuras” del municipio perogilense. El pasado viernes arrancaban The Frank Rock&Blues Band, banda abierta por la que cada año van pasando diferentes músicos locales, con el fin de demostrar que el espíritu del rock y el blues sigue vivo en Torreperogil.
Esta edición se han subido al escenario Salva, Juanfra, Luis y Dani, que animan a los amantes de la música a seguir asistiendo a “un festival de escándalo que no decepciona a nadie, celebrado en un entorno muy bonito, con un escenario y una acústica inmejorables”.
El segundo turno fue para un grupo muy heterogéneo, formado por una holandesa que puso una voz con mucha garra, un alemán, un argentino, un inglés y un malagueño. “Todos nos encontramos en Málaga porque vivimos allí”, cuenta Javi, el guitarrista. Con sus versiones, Manuela and The Soul Show rinden todo un homenaje a los artistas de los 60 y los 70 que pasaron por la discográfica norteamericana Motown. Los componentes coinciden en que nunca habían conocido un festival de blues “tan potente como este”.
La noche del viernes acabó a altas horas de la madrugada con la actuación de Los Brazos, un grupo procedente de Bilbao que ha formado parte del Frank Rock&Blues Festival por segundo año consecutivo, tras la gran acogida que tuvieron en la pasada edición. Dejaron sonidos sureños y eléctricos con la presentación de su último trabajo “Gas” y la grabación de su potente directo durante el concierto, que hizo saltar a todos los asistentes. William, vocalista y guitarrista, Koki a la batería y Txemi al bajo, cuentan que cuando empezaron a buscar festivales en los que participar para darse a conocer “el Frank Rock&Blues Festival era uno de los objetivos, teníamos muchas ganas de venir aquí, y por eso no lo pensamos dos veces a la hora de repetir”.
El auditorio “Torres Oscuras” se fue llenando con la actuación del gran guitarrista y armonicista natural de Nueva York, Richard Ray Farrel, acompañado del potente Jesús a los teclados, Kike a la batería y Ángel al bajo. Todo un bluesman que ha tocado en numerosos países con algunos de los más grandes. “Prefiero actuar en un sitio como este donde la gente aprecia la música que tocar en un lugar muy grande al que la gente acude sin interés”, afirma el neoyorquino.
Los encargados de rematar la noche fueron los sevillanos con potentes influencias americanas The Milkyway Express, que lanzan nuevo disco en los próximos meses. “Es evidente que este festival está hecho con mucho cariño, y eso es muy importante. Hay festivales grandes muy buenos, pero se nota que no hay tanto esfuerzo y cariño detrás”, opinan sobre el Frank Rock&Blues Festival.
Los asistentes tenían ganas de más, y en todas las actuaciones corearon “otra, otra” pidiendo más canciones del repertorio de grandes músicos procedentes de todo el mundo que dejaron con muy buen sabor de boca a un público entregado durante todo el fin de semana.
