WUOLJA: fuzz, crudeza y peso emocional en formato dúo

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WUOLJA: stoner y grunge en estado puro

Si pudiéramos retroceder en el tiempo, tal vez habríamos arrancado antes. Tuvimos durante años ideas, riffs, letras guardadas… pero no terminábamos de dar el paso. Aun así, también creemos que cada persona y cada banda tiene su momento, y sentimos que ahora estamos en nuestro punto más fuerte: con más experiencia, más claridad, y más ganas que nunca.

Wuolja somos solo dos: guitarra y batería. Todo lo que se ve y se escucha lo hacemos entre dos personas. Y en un mundo donde los músicos tienen que ser community managers, diseñadores, productores, técnicos, managers y creativos a la vez, sabemos bien lo que significa levantar un proyecto desde cero. Lo hemos hecho todo: componer, grabar, ensayar, buscar bolos, mover redes, hacer portadas, vídeos…

Pero no lo decimos como queja: todo esto nos gusta. Nos motiva. Forma parte del viaje. Y seguramente si lo llevamos como lo llevamos es gracias a nuestras experiencias previas, tanto en otras bandas como en nuestros trabajos fuera de la música. Todo eso nos ha dado herramientas para trabajar con cabeza y corazón.

Aprovechamos también para invitar a todo el mundo a descubrir nuestra música y a venir a nuestros conciertos. Mucha gente se sorprende de lo que puede generar un dúo sobre un escenario. Tenemos muy buenos feedbacks de la gente que nos ha venido a ver. Os animamos a echarnos un ojo.

Los conciertos son el núcleo de Wuolja. Todo lo que hacemos —componer, grabar, ensayar— está pensado para que el directo sea una sacudida. El setlist no es fijo: lo adaptamos según el tipo de sala, el momento o la energía del público. Pero siempre buscamos que haya un viaje: empezar fuerte, mantener la tensión, crear atmósferas, y cerrar por todo lo alto.

Hay temas que nunca pueden faltar. “Años luz” y “De sol a sol” son de esas canciones que disfrutamos tocando cada vez. Nos llevan a un lugar especial, y también conectan muy bien con la gente. “Space Stoner” es otro momento clave del show: es pura conexión stoner, un punto de encuentro donde el ritmo marca el pulso y sabemos que la gente va a sacudir la cabeza con nosotros. Es casi un ritual.

Además, intentamos que el directo no sea solo musical. Cuidamos mucho los visuales: luces, proyecciones, sombras… Queremos que cada concierto sea una experiencia inmersiva, hipnótica, como si te metieras dentro de nuestro universo stoner durante un rato. Aunque seamos solo dos en el escenario, el objetivo es llenar el espacio y dejar una huella.

Nuestras mayores influencias vienen de bandas que han sabido mezclar peso, actitud y personalidad. Kyuss, Truckfighters, Niña Coyote eta Chico Tornado, Nirvana, Karma to Burn… están muy presentes en nuestro ADN. Nos sentimos conectados con ese tipo de sonido: crudo, hipnótico, con riffs que aplastan y una energía que no pide permiso.

Aun así, no intentamos copiar a nadie. De hecho, algo que nos dicen mucho es que no se nos puede encasillar fácilmente, y eso nos parece clave. Hemos mamado música de todo tipo desde pequeños —stoner rock, punk, rock alternativo, grunge, hard rock, rock clásico, rock pop…— y todo eso va quedando en nosotros, consciente o inconscientemente. Casi todas nuestras influencias lo hacen en otros idiomas, pero decidimos usar el castellano porque sentimos que es como mejor expresamos lo que llevamos dentro. Nos permite conectar desde otro lugar, y creemos que le da una identidad aún más propia a lo que hacemos. Lo que hacemos con Wuolja es canalizar esa mezcla, pero desde nuestra propia visión.

Musicalmente nos movemos entre el stoner rock y  el grunge pero siempre buscando una identidad propia. No se trata solo de sonar potente, sino de transmitir personalidad. Queremos que cuando alguien escuche Wuolja no piense “me recuerda a tal banda”, sino “esto suena a Wuolja”. Y creemos que lo estamos consiguiendo.

Ha habido varios momentos clave, pero si tuviéramos que elegir uno, seguramente sería nuestro primer concierto oficial como Wuolja. Después de meses de trabajo encerrados en el local, componiendo, grabando y buscando nuestro sonido, subirnos al escenario y sentir la conexión con el público fue un antes y un después. Fue como confirmar que todo el esfuerzo valía la pena.

También marcó un punto importante la salida de “Penumbra”, nuestro primer trabajo largo. Fue el primer paso serio para mostrar el universo sonoro que llevamos dentro. Desde entonces, cada nueva canción, cada bolo, cada colaboración… ha sido un peldaño más.

Y otro momento que nos está marcando es el presente: ver cómo las escuchas crecen, cómo más gente nos sigue, nos escribe, comparte nuestra música… Ver las estadísticas subir, los impactos en la gente , los comentarios, todo eso nos motiva a seguir y hacer más ruido. Porque eso nos confirma que estamos transmitiendo lo que queremos, con nuestro lenguaje, con nuestra energía, y desde nuestra esencia.

Lo más potente es que todo esto lo hacemos solo dos personas. Y cada vez que alguien nos dice que no se esperaba un show así de un dúo, sabemos que vamos por buen camino. Pero también tenemos claro que esto no ha hecho más que empezar.

El nombre de Wuolja nace de la mezcla entre nuestros nombres —Borja y Benja— y también de la palabra “wolf” (lobo en inglés), como símbolo de fuerza, independencia y supervivencia. Desde el principio sentimos que este proyecto tenía algo de eso: una criatura que avanza sola, construida desde la raíz por muy pocas personas, con esfuerzo y constancia.

También nos inspiraron propuestas como Reignwolf o Hombre Lobo Internacional, proyectos intensos creados desde la mínima formación, pero con una energía salvaje. Queríamos algo que representara ese espíritu: directo, crudo, pero con identidad.

Además, buscamos un nombre que no existiera, que tuviera buen SEO, que fuera fácil de recordar y reconocible en plataformas. Wuolja cumple con todo eso: corto, sonoro, misterioso y original. Así que creemos que nuestro nombre lo tiene todo, una simbología con nuestras ideas, nombres, esfuerzo, trabajo y además aportando esa originalidad para conectar con el público.

Gracias a LaCarne Magazine por dejarnos este espacio y por interesarse en nuestra historia. A quienes ya nos seguís, mil gracias por estar ahí, por compartir, por venir a los conciertos y ayudarnos a hacer ruido. Cada pequeño gesto cuenta, y todo esto se sostiene gracias a ese apoyo real.

Y a quienes nos descubren ahora: Wuolja es un grupo de stoner rock formado por solo dos personas. Guitarra, batería… y mucho más. Llenamos el escenario y el espacio con dos amplificadores de guitarra y uno de bajo, como Royal Blood pero al revés. Nuestro sonido es denso, crudo, directo e impactante.

Os animamos a escucharnos, a seguirnos, a compartir si os vibra lo que hacemos. Que apoyéis a las bandas emergentes, porque ahí es donde está la energía más salvaje y auténtica. Y sobre todo, venid a vernos en directo. No es solo un concierto: es una experiencia inmersiva, intensa, que os va a sacudir. Nos dejamos el alma en cada tema, y estamos deseando compartirlo con vosotros.

También queremos agradecer a Matías Ruda, por ayudarnos a producir y sacar nuestros temas a la luz con una calidad brutal, y a FA Management por su apoyo constante para que podamos llevar nuestra música al escenario.

Nos vemos pronto. Bien cerca del escenario. Con el volumen bien alto.

MAS INFORMACIÓN SOBRE WUOLJA: Instagram, YouTube, Facebook, Spotify

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