La banda capitalina de Metal Sinfónico, Dakuri, realizó su primer videoclip que corresponderá a la canción La Bruja, pieza popular mexicana de la región jarocha, y de la que se han realizado innumerables interpretaciones y versiones.
Sobre las razones de hacer el videoclip de un cover y no de una canción original, la vocalista, Itzi Guadiana, comentó que la idea le nació desde por lo menos hace dos años, cuando formaba parte de otra agrupación.
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Detrás de las cámaras de su nuevo video de Dakuri
“Esa canción me la enseñó el tecladista, me dijo que sería buena idea adaptarla a nuestro estilo, pero nunca la pudimos hacer, y se me quedó la idea desde entonces”, explicó la cantante, quien también se encargó de la producción ejecutiva del video.
Originalmente planeado en Cuernavaca, el rodaje se realizó en una casa abandonada de la alcaldía de Coyoacán, en cuyo tercer piso fueron aprovechados tres cuartos para maquillaje, vestuario y escenario principal.
La sesión duró más de diez horas. El llamado fue a las nueve de la mañana, y terminó aproximadamente pasadas las ocho de la noche, tiempo que transcurrió como agua pues nunca hubo un momento desperdiciado.
El primero en llegar fue Dante, músico multiinstrumentista y benjamín del grupo, recién incorporado a las filas de Dakuri apenas unos meses atrás. Su primo, Carlos, fue el que facilitó las instalaciones de la locación.
Casi toda su interacción con la banda ha sido a distancia. “Apenas nos hemos visto una vez. Ésta va ser la segunda”, explica. Dakuri marca su regreso a la música después de un retiro de varios años, en los que intervino la escuela y el trabajo.
Con una experiencia que lo ha llevado a tocar en varias partes de la República, recuerda que tiempo atrás tuvo la intención de adaptar piezas de mariachi al género, “pero a mi mejor amigo no le gustó la idea, así que decidí hacerlo por mi cuenta”.
Fue en ese momento cuando se enteró que Dakuri buscaba guitarrista, y la idea de grabar La Bruja embonó a la perfección con su inquietud de explorar la música tradicional mexicana desde el lenguaje del metal sinfónico. “Además, siempre quise formar parte de una banda así”, aseguró.
Luego llegaron David y Damián, bajista y guitarrista respectivamente, una mancuerna con una amistad muy añeja. ¿Unos 20 años de amistad?, le preguntamos a David. “¡No, son muchos más! Nos conocimos en tercero de primaria”, responde.
“Para ponerlo en perspectiva, llevamos más tiempo de conocernos de lo que Alex tiene de vivo en este mundo”, explica Damián, refiriéndose al baterista y cofundador de Dakuri.
Un video grabado con celular
El rodaje estuvo a cargo de Ali Rebollar, un baterista amo del blastbeat con 20 años de trayectoria, que, a la muerte de The Greatness Design, su banda, se dedicó a la producción e ingeniería de audio.
“Íbamos bastante bien”, narra Ali recordando los tiempos con The Greatness Design, “le abrimos a muchísimas bandas en muchísimas partes de la República. No es por nada, pero el disco que lanzamos (refiriéndose a: Pillars Of Creation, lanzado en 2013) nos quedó muy bien”.
¿Y luego qué pasó?, le preguntamos. “Pues empezaron los problemas, al punto que terminamos peleándonos”, dijo sin poder ocultar el lamento al platicarlo.
Meses después del cisma, Ali se metió al correo electrónico de la banda. “Envié el disco a todas partes, hasta a otros países como Japón y algunos otros de Europa, y vi que nos había respondido una disquera de por allá”.
El correo era un halago a su disco, y la propuesta explícita de hacer una reedición con ellos y ofrecerles un contrato para poder girar y tocar en varias partes del mundo.
“Le dije a la banda, pero ya nadie quiso seguirle. Ni modo, así son las bandas, tarde o temprano surgen ese tipo de problemas”, dijo para después terminar de conectar su iluminación.
Rebollar hizo un viaje de casi dos horas desde Pachuca, Hidalgo, con un juego de luces, reflectores y muchos metros de extensiones. Su método de trabajo generó suspicacias al principio, pues utilizó una cámara periférica conectada a su dispositivo móvil.
“¿Vamos a grabar con celular?”, preguntó muy extrañado Damián. Después de explicarle la situación, Itzi replicó con ironía que lo mismo le preguntó a Ali cuando vio el celular; pero no, no fue grabado con celular.
A falta de tiempo, buena organización
Apenas una hora después de haber llegado todos a la locación, ya todo estaba listo para ser grabado. Banda, maquillista y director tenían el itinerario de cuánto tiempo debían tardar en realizar las tomas para poder terminar el video ese mismo día.
“Originalmente el plan era grabar todo lo que no necesita maquillaje un sábado, y luego grabar todas las tomas con maquillaje el domingo, pero es muy difícil porque no tenemos mucho tiempo”, explicó Damián. “Ni tampoco tenemos tanto dinero como para cubrir dos días de producción”, añadió Itzi.
Esto obligó a la banda, específicamente a Itzi y Alex, a crear un plan perfectamente coordinado que les permitiera aprovechar los tres espacios de la locación para grabar las escenas, mientras otros se maquillaban, mientras otros se cambiaban de ropa.
La escaleta permitió un ritmo de trabajo perfectamente fluido que ya quisieran tener muchos becarios del Fonca. El método era grabar de forma individual a cada miembro, y luego hacer tomas con todo el grupo, primero sin maquillaje y luego con maquillaje.
Las tomas sin maquillaje fueron las más fluidas. Las segundas tomaron más tiempo, pues las luces arruinaban el ornato facial, sobre todo el del baterista, producto del sudor emanado.
El maquillaje que causó furor
Mientras los miembros terminaban de ser maquillados, se realizaron otras tomas complementarias que incluyeron a un canino xoloitzcuintli en una cama de flores de cempoalxóchitl, y una ofrenda con las fotografías de los miembros de la banda.
El video también contó con la participación del señor Guadiana, padre de Itzi, quien jamás ha cejado en apoyar tanto a Itzi como a Alex en sus esfuerzos por lograr el ansiado sueño (cada vez más cercano) de lanzar el disco debut de Dakuri.
De todos, el maquillaje del señor Guadiana fue el que más halagos le significó a la maquillista. Bastaba con bajar levemente su rostro para lanzar una imagen muy imponente aun sonriendo.
“¡Sí se ve bien malote, señor!”, dijo Carlos, el anfitrión de la locación, algo en lo que todos coincidieron. Sus escenas con Itzi incluyeron una coreografía basada en bailes regionales, aprovechando la experiencia del señor Guadiana en ese rubro.
Dichas escenas fueron de las que más le gustaron a Ail, al grado de solicitar una toma específica para su portafolio.
“Desde que Itzi apenas aprendía a hablar ya escuchaba las bandas que yo escuchaba. A mí siempre me gustó Kiss, Led Zeppelin, cosas así, y me pedía que las pusiera”, platicó el señor Guadiana en un breve intermedio de descanso con los demás miembros de la banda.
“Y ahora es gracias a ella y a Alex que he podido conocer nuevas bandas, como Nightwish. En serio que esa banda es lo máximo para mí, ¡Helloween también me gusta mucho!”, cerró el señor con tan conducente, pertinente y lúcido último comentario.
Con prisa, pero despacio
Cuando todos los miembros fueron debidamente maquillados, pasaron a cambiarse. Todos utilizaron un traje formal con corbata, parecían economistas de alto rango de maldad tocando instrumentos musicales.
A pesar de la prisa por partir a buena hora, Ali no escatimó esfuerzos ni atención para las últimas escenas. El cansancio era notable en todo el equipo, desde la maquillista, su novio (que fungió como apoyo vital para reducir tiempos) y todo Dakuri, pero se logró construir un ambiente tan alejado de la presión que todo fluyó sin problemas.
La última toma, que incluyó a todos los miembros en escena, fue terminada con una andanada de aplausos de todos los ahí presentes, una práctica tan común en todas las producciones que no por eso deja de perder una nítida y auténtica espontaneidad de alegría.
“La verdad es que, desde que me estaban maquillando, estaba muy presionada por que no faltara nada”, narra Itzi. Y nada faltó. El plan salió al 99% de lo planeado. No fue el 100 porque, ¿quién lo ha alcanzado alguna vez?
Con la noche encima y una intensa lluvia en la calle, todos ayudaron a retirar el equipo de iluminación, desarmar la batería y guardar todos los instrumentos. En 20 minutos, el recinto volvió a ser la casa abandonada que era en la mañana.
El plan es estrenar el video de La Bruja en Día de Muertos. Será el cuarto sencillo de Dakuri, después de lanzar a lo largo de este año: Prophecy, Vision y Time Out.
Con casi una docena de piezas listas en preproducción, la agrupación continúa cimentando el sendero a su disco debut, y este video será un paso fundamental.
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