La música en el cine, Música Incidental y Banda Sonora Original

En esta nueva entrega repasaremos la historia de la música en el cine, y el impacto que ha tenido a lo largo de los años, desde sus inicios hasta la actualidad.

Qué sería del cine sin la música, seguramente no tendría el mismo impacto en las películas que tanto nos gustan, y los efectos sonoros se sentirían minimizados sin el apoyo musical. Es por eso que empezaremos por repasar los orígenes y tipos en los que se divide.

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Un viaje por la música en el cine

música en el cine

La historia de la música en el cine es muy interesante y variada. Ésta se puede dividir en dos tipos principales: Música Incidental y Banda Sonora Original.

La música incidental es la que acompaña las escenas de una película para crear ambientación o reforzar la narración, y suele ser compuesta específicamente para cada película por un compositor profesional. 

En cuanto a la banda sonora original, es la que incluye también música preexistente, diálogos y efectos de sonido, y suele ser editada y comercializada como un producto aparte de la película. 

Entendiéndolo de esta manera, la música en el cine es el complemento auditivo que refuerza la historia y los diálogos de las escenas que vemos en cada cinta cinematográfica. Es por ello que ha cobrado tanta relevancia, y no sólo en las en películas, también en las series, animaciones, e incluso en la publicidad logra tener un impacto que en ocasiones puede pasar desapercibido, pero que sin ella no sería lo mismo, ni tendría la emoción que logra conseguir el poder de la música. 

Revisando la historia, vemos que la música incidental tuvo sus orígenes en el cine mudo, cuando se usaba música en vivo o grabada para cubrir el ruido del proyector, o para darle más emoción a las imágenes. Uno de los instrumentos que fue ideado para la época fue el Fotoplayer Americano. Su función para la cual fue construido específicamente era la de proporcionar efectos de sonido y música para cine mudo.

Los teatros pequeños usaban pianos mecánicos para producir música automáticamente a partir de rollos de piano. Con el tiempo, algunos de estos pianos se ampliaron en tamaño con órganos de tubos y efectos de sonido insertados en grandes gabinetes conectados a los lados del piano. 

El Fotoplayer Americano era atractivo para los propietarios de los teatros del momento, ya que no requería habilidades musicales importantes para operarlo, pues este mismo contaba con un sistema en el que se tocaba el teclado del piano y el órgano de tubos mecánicamente usando un motor eléctrico, una bomba de aire, y rollos de piano tal como el de una pianola.

Mientras, el operario del Fotoplayer seguía la acción en pantalla de manera coordinada tirando de cuerdas, presionando botones y pedales para producir sonidos relacionados con lo que estaba ocurriendo en el transcurso de la cinta fílmica. Esto hasta finales de la década de 1920, cuando aparece el cine sonoro, y por lo tanto entró en desuso este instrumento mecánico que fue toda una obra de ingeniería para su época. 

Algunas de las primeras bandas sonoras originales fueron creadas por compositores como Camille Saint-Saëns y Joseph Carl Breil a principios del siglo XX. Con la llegada del cine sonoro en 1927, la música pasó a ser parte integrante de la película, y se empezó a grabar junto con los diálogos y los efectos de sonido. 

Algunos de los primeros compositores para el cine sonoro fueron Louis Silvers, quien ganó el primer Oscar a la mejor banda sonora original por One Night of Love en 1935.

Max Steiner, considerado el padre de la música cinematográfica moderna, y quien a su vez compuso clásicos como Lo que el viento se llevó o Casablanca

A ellos se les suma Alfred Newman, quien fue el director musical de la 20th Century Fox, y ganó nueve Oscars por películas como El rey y yo, o Camelot, entre otras. 

Etapas en la evolución estilística de la música en el cine

La música en el cine ha evolucionado a lo largo de las décadas, adaptándose a los cambios tecnológicos, estéticos y culturales. Se pueden distinguir tres grandes etapas en la evolución estilística de la música en el cine: el Sinfonismo Clásico (1930 a 1950), el Tema Principal (1951 a 1971) y el Nuevo Sinfonismo (1972 a 2022). 

El sinfonismo clásico se caracteriza por el uso de orquestas grandes y melodías románticas, inspiradas en la tradición clásica occidental. Algunos de los compositores más representativos de esta etapa son Erich Wolfgang Korngold, Miklós Rózsa y Bernard Herrmann

El tema principal se caracteriza por el uso de una melodía distintiva que identifica a la película o al personaje principal, y que se repite a lo largo de la banda sonora con variaciones. Algunos de los compositores más representativos de esta etapa son Henry Mancini, Ennio Morricone o John Barry

El nuevo sinfonismo se caracteriza por el uso de orquestas combinadas con elementos Electrónicos, Rock, Pop, Jazz o Étnicos, creando un sonido más diverso y contemporáneo. Algunos de los compositores más representativos de esta etapa son John Williams, Jerry Goldsmith, Hans Zimmer o Alexandre Desplat.

Funciones de la música en el cine

La música en el cine tiene varias funciones, como crear atmósferas, enfatizar emociones, sugerir lugares o épocas, comentar la acción, identificar personajes o temas, generar expectación o sorpresa.

Es por ello que las bandas sonoras pueden incluir temas recurrentes que se asocian con personajes o situaciones específicas, lo que ayuda al espectador a entender mejor la trama y las relaciones entre los personajes.

Además de ello, la música también puede ser diegética o extradiegética, según si forma parte del mundo ficticio de la película. Por ejemplo, una canción que suena en una radio mientras el personaje de la escena interactúa con lo que suena en ese momento, o si solo es audible para el espectador. Por ejemplo, una música que subraya un momento dramático, es decir, que la única interacción es con el espectador, mas no con el personaje de la película. 

La música para cine se ha vuelto un arte complejo y fascinante que requiere de un proceso creativo que implica varias fases: el proceso inicia por el Spotting Session, que es la reunión entre el director, el productor, el editor musical y el compositor, quienes tienen la tarea de decidir qué escenas llevarán música, en qué momento entran o finalizan, así como sus características sonoras y la relación que debe mantener con el contexto de la película y los diálogos de cada una de las escenas. 

Por otra parte, la Sincronización es el proceso donde se ajusta la música al ritmo y al tiempo de las imágenes, mientras que la Composición tiene que ver con la creación de la música original con las especificaciones que la película necesite. Ésta va acompañada de los arreglos musicales, que es el proceso final de la composición. A lo cual le sigue la Orquestación, que es la manera en la cual se distribuyen las partes musicales entre los diferentes instrumentos de acuerdo al formato orquestal o de banda que se requiera.

Tras todo esto viene la Grabación, en donde se interpreta y se registra la música, haciendo la captura generalmente en estudios profesionales o recintos adecuados para este propósito. Allí entran en escena el productor, el ingeniero de sonidos y los músicos profesionales. Dentro de este proceso hay varias etapas tales como la preproducción (allí se realiza el montaje y se graban maquetas o demos para tener una idea de referencia).

Luego viene la producción (etapa donde se graba y se realiza la mezcla, es decir, se equilibran los niveles de sonido entre la música, los diálogos y los efectos). Después de eso finaliza dicho proceso con la postproducción (etapa en la cual se dan los últimos retoques mediante la masterización, proceso para equilibrar los elementos sonoros de una mezcla estéreo a través de la ecualización y optimización para su respectiva reproducción en todos los sistemas y formatos). 

De esta manera se llega a un producto final, cuyo resultado es la grabación sonora que servirá como pieza maestra lista para ser incorporada en el montaje de una película.

Como podemos darnos cuenta, todo este arduo proceso en el que están involucrados compositores, directores, productores, músicos, ingenieros de sonido y diseñadores sonoros, conlleva una gran labor que, como espectadores, solemos pasar por alto, ya que nos enfocamos en la historia, los efectos especiales, la fotografía u otros elementos del film, pero, sin duda, la influencia que ha tenido la música en el cine es tan importante como cada una de las historias con las que nos hemos deleitado en los teatros y en nuestros hogares durante cientos de horas. 

En conclusión, la música es un elemento fundamental en el cine. Desde los primeros días en el que le dio vida al cine mudo, la música ha sido utilizada para mejorar la experiencia del espectador y para transmitir emociones y sentimientos que las imágenes por sí solas no podrían transmitir. 

La música puede crear tensión, suspenso, alegría, tristeza, y una amplia gama de emociones y sensaciones en el espectador. A su vez puede ser utilizada para establecer el tono y el ambiente de una película. Por ejemplo, una película de terror puede utilizar música oscura y siniestra para crear una atmósfera de miedo e inquietud, mientras que una comedia romántica puede utilizar música alegre y optimista para crear un ambiente de felicidad y amor, incluso regalarnos melodías memorables que traspasan el tiempo y nos traen buenos recuerdos cuando las volvemos a escuchar, pues con solo oír la banda sonora podemos asociar el momento en que vimos por primera vez dicha película junto a esa persona especial. 

Además, la música puede ser utilizada para contar la historia de una película. Tal es el hecho de los musicales de Broadway que han llegado a la pantalla gigante, trayendo un espectáculo audiovisual para el disfrute de las nuevas generaciones. 

En resumen, la música es un elemento crucial en el cine que puede mejorar significativamente la experiencia del espectador, no solo reforzando la trama sino ayudando a contarla. Sin música, el cine no sería lo mismo, es por ello que en los festivales de cine y en los diferentes galardones que hay en el mundo, se han creado categorías especiales en los que se premia a la música. 

Desde LaCarne Magazine esperamos que haya sido enriquecedor este artículo, y que nuestros lectores la próxima vez que vayan a ver una película, piensen en la música como un personaje más de la historia, y se dejen envolver por la emoción de cada sonido, ritmo o melodía que llegue a sus oídos, pero sobre todo a sus corazones. 

Enlaces de Interés: ¿Cómo se hacía la música del cine mudo?, Historia de la música de cine

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