Sam Cooke, el Rey del Soul

¿No os pasa a veces que os da miedo compartir algo que os gusta mucho por miedo al prejuicio hacia esa propia cosa? Pues a mí esto me pasa con Sam Cooke, uno de mis artistas preferidos, y de los más importantes dentro de la música negra, cuyo asesinato parece ensuciar una carrera increíble y crucial para la evolución del Soul y el Pop.

Realmente es una historia sórdida, triste, y seguramente injusta, así que vamos a intentar ser objetivos y centrarnos en la grandiosidad del Rey del Soul.

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Sam Cooke, el Rey del Soul

sam cooke

Sam Cook (le añadió la e cuando empezó a adquirir popularidad) nació el 22 de enero de 1931 en Clarksdale, Misisipi. En 1933 se mudó junto a su familia a Chicago.

Su padre era ministro de la Iglesia de Cristo, y, como manda la tradición, Sam se inició en la música a través del Góspel. Comenzó junto a sus hermanos en un grupo llamado Singing Children, con 6 añitos. Con 14 ya era cantante del grupo de Góspel Highway QC.

La verdadera carrera de Sam Cooke comienza en 1950, cuando es contratado para sustituir al cantante principal del grupo Soul Stirrers, R. H. Harris (fundador y quien consiguió el primer contrato del grupo). En 1951 salía a la luz la primera grabación con Sam como cantante: Jesus Gave Me Water. Después vendrán Peace In the Valley o One More River entre otras.

Sam conseguía acercar la música Góspel al público más joven, y no sólo por su gran atractivo (era obvio cómo las chicas iban a verle actuar), también por ese chorro de voz dulce, suave e inigualable. Soul Stirrers pronto se convirtió en un grupo bastante fenómeno, a pesar de la temática religiosa, algo que consiguieron gracias al talento y carisma de Sam.

En 1956 sale el primer sencillo de Sam Cooke, que se aleja un poco del Góspel más tradicional para acercarle al Pop, Lovable (era una nueva versión del tema góspel Wonderful). Ya hemos comentado con otros artistas, que los cantantes de Góspel que iniciaban una carrera pop tenían muchos estigmas para con sus comunidades, que pensaban que banalizaban con el tema divino.

Sam Cooke, como buen pionero (junto a Ray Charles), tuvo muchos problemas, hasta que el sello con el que trabajaba con Soul Stirrers le permitió grabar algo que no fuera Góspel. Al final fue Sam quien abandonó el sello.

https://youtu.be/_8kSIv_MTVk

Si bien Lovable no fue un súper éxito, sí que le abrió la puerta a Sam Cooke para hacer la música que quería. Un año después ya estaba trabajando en solitario, consiguiendo un contrato con Keen Records, donde sacó su primer éxito: You Send Me, una canción inolvidable, cuya cara b contenía nada más y nada menos que una versión de Summertime, que, para mí, es la versión que mejor recoge el ambiente sureño del que habla.

Mega exitazos comerciales ambos, por supuesto le proporcionaron muchísima popularidad. Sam Cooke pasó de ganar 200$ a la semana a más de 5000. Esto le haría plantearse muchas cosas con respecto a la industria musical.

https://youtu.be/Plmy20qMYm4

Después de Keen Records, pasó por varias compañías más, hasta que finalmente se decidió y en 1961 fundó su propio sello musical, SAR Records, junto a J. W. Alexander, y su manager, Roy Crain. En poco tiempo el sello contaba con una buena cantera de músicos negros, como Mel Carter, Johnnie Taylor o The Valentinos (Bobby Womack y sus hermanos), por no hablar de los éxitos que cosechaba el propio Sam, que era un compositor muy prolífico, y también se dedicaba a supervisar arreglos de todo tipo y estilo.

Al poco, creó también una empresa de gestión e impresión editorial: Kags S.C. Sam Cooke fue consciente del dinero que movía la industria musical, y el trato que ésta siempre había dado a los músicos negros, por lo tanto se propuso crear un negocio donde no se los engañara, y tuvieran beneficios acorde con sus éxitos.

Ésta fue la verdadera lucha racial de Sam Cooke, ya que, como a muchos otros artistas, a Sam se le acusó de venderse al público blanco, cuando su misión era elevar al mismo calibre a músicos negros de lo que estaban los blancos. Cooke generaba muchísimo dinero, que él mismo administraba… Era un negro, rico, que encima presumía de ello.

Como os podréis imaginar, a la puritana y racistilla Norteamericana esto no le gustaba… Encima estaba todo el día para allá y para acá, moviéndose con personalidades importantes de la lucha por los derechos civiles de los negros. Vamos, que Sam Cooke era un tipo incómodo para la blanca sociedad norteamericana.

En cuanto su vida privada, Sam era un tanto pieza. Se casó dos veces, primero con una bailarina llamada Dee Dee Mohawk en 1953, de la que separó 5 años después, y con quien tuvo un hijo, Joey.

Su segunda esposa fue Barbara Campbell, con quien tuvo 3 hijos. La verdad es que la historia familiar de Sam es bastante sórdida. Dos de sus hijos murieron ahogados en una piscina estando al cuidado de la madre, que a la muerte de Sam se casó (pasados tres meses) con Bobby Womack, supuesto amigo de Sam Cooke, y de quien se descubrió años más tarde que había abusado sexualmente de la hija mayor de Sam y Barbara.

Bueno pues aquí no acaba la cosa, porque esta hija acaba casándose con el hermano menor de Bobby, Cecil Womack, creando el dúo Womack&Womack.

En torno a su asesinato, existen muchas historias escabrosas. Yo no estuve allí, así que, bien documentada, os voy a contar lo que pudo pasar de la manera más objetiva posible. El 11 de diciembre de 1964 aparecía en el Hacienda Motel, al sur de Los Ángeles, el cuerpo de Sam Cooke con varias balas en cuerpo, que le propinó la gerente del motel, Bertha Franklin, supuestamente alegando defensa personal.

Al parecer, Sam llegó al motel con una chica llamada Elisa Boyer. Según la versión de Boyer, Sam la llevó en contra de su voluntad e intentó violarla. Parece que en un momento dado, ella consiguió escaparse y corrió hasta una cabina telefónica cercana, donde llamó a la policía.

Supuestamente, Sam salió al cabo de un rato casi desnudo, y se dirigió a la gerente, que, al verle así, parece que se asustó, y primero le disparó, y después le golpeó en la cabeza. El caso se cerró sin más, con inocencia para la gerente como homicidio justificable.

La mayoría de la gente que conocía a Sam Cooke rechaza esta versión. Incluso testigos oculares que vieron a Cooke y Boyer antes de irse al motel declararon a favor de Cooke. La familia abrió una investigación privada, y conseguirse legalmente. No se consiguió nada, pero sí se aclararon muchas cosas…

Tanto la versión de Boyer como la de Franklin hacían agua por todos lados. Además, muchos amigos vieron el cuerpo de Sam, y, bueno,… en palabras de Etta James: “su cuerpo tenía restos de una brutal paliza, la cara completamente desdibujada, las manos destrozadas y la cabeza casi separada de los hombros”.

Muchísima gente ha rechazado la versión oficial, y se piensa en una conspiración para acabar con el cantante… Tampoco es tan descabellado, pues Sam Cooke era una personalidad poderosa, un negro con muuuucho dinero, que se manejaba perfectamente por la industria de la música sin intermediarios, e implicado públicamente con el movimiento por los Derechos Civiles de los negros, así que, bueno… juzgad vosotros y vosotras mismos.

Un año después de su muerte, salía a la luz el sencillo póstumo Shake, cuya cara B era la histórica A Change Is Gonna Come, considerada la canción protesta clásica del movimiento.

Es curioso porque parece que Sam la escribió a raíz de escuchar la canción de Bob Dylan Blowing In The Wind. Parece que Sam se enfadó mucho consigo mismo porque fuese un blanco quien hubiese escrito algo tan significativo, así que se propuso escribir un tema que reflejase lo que había sufrido la gente negra, y así surgió el temazo de Soul por excelencia. Una canción compleja musicalmente, con arreglos muy refinados, y, una vez más, con la demostración vocal de Sam Cooke, imposible de superar.

Sam siempre aspiró a convertirse en una estrella para todos los públicos. Eso sí, no dejó nunca de tener presente la importancia de las actuaciones en el sur de EE. UU.

En muchas ocasiones se le acusó de tener poca implicación por la lucha, pues sus canciones normalmente hablaban de amor, temas amables con mucha tradición religiosa. sin embargo, no era uno de esos artistas negros que reclamaba reconocimiento y aceptación por su especifidad cultural o por su orgullo racial, cosa que también tenía, ojo, pero su verdadera lucha racial fue convertirse en un magnate de la industria musical, consiguiendo muchos royalties para artistas negros, e ingestas cantidades de dinero para sus artistas, por no hablar de su corta pero intensa carrera.

Sam Cooke hizo la música que quiso, cuando quiso, y como quiso, y ¿qué pasó con esto? Pues que le salió genial, hasta el punto de que inventó el Soul tal y como lo conocemos hoy en día. Yo creo que el título del Rey del Soul está más que justificado.

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