El nuevo trabajo de Michel Cires, ‘Mind & Soul’, es un reflejo de muchas etapas, tal como lo refleja la diversidad de estilos musicales que plasmó durante todo el álbum, pero principalmente centrado en el rock y la música funky.
También representa un concepto que le marca a la hora de componer, el lado analítico de la música y el pasional, lo racional y lo emotivo.
Y no podía faltar la esencia de la música cubana en algunos temas. ‘Tropical Blues’, el segundo corte del disco, es una combinación bien estudiada de un son cubano con notas de blues en cada melodía y solo del tema, quizás con unas claras reminiscencias al estilo de Santana. Pero en el lado opuesto está ‘Stara Planina’, un tema de rock progresivo con una atmósfera de música balcánica.
El álbum finaliza con un manouche, que es un claro homenaje al gran Django Reinhardt. La inspiración de este tema viene en gran parte de la música de la filmografía de Woody Allen, principalmente ‘Acuerdos y Desacuerdos’.
Llevaba varios años realizando composiciones, de diferentes maneras y con diferentes medios, e incluso profesionalmente trabajando para Mediaset desde el año 2012 al 2014. Se estaba perfeccionando cada vez más en la labor de producción musical.
Y después de empezar a componer algunos temas en el verano de 2016, nació el presente álbum ‘Mind & Soul’, el cual ya está disponible en tiendas y plataformas digitales (CdBaby, Amazon music, Google Music, etc). Michel Cires necesitaba ese paso decisivo, tener un trabajo que demostrara fielmente todo el progreso de sus años como músico y compositor.
Historia de Michel Cires
Michel Cires nació en Pinar Del Rio, Cuba. Debido al entorno musical, padre percusionista y madre cantante del Coro Nacional de Cuba, desarrolló su interés y vocación por la música. Desde niño en su casa se podía escuchar desde el ‘Requiem’ de Mozart a un disco de Stevie Wonder, y otros géneros muy diversos.
A la tardía edad de 16 años comenzó su incursión en la guitarra, comenzando con la magnífica profesora Leopoldina Núñez las clases de guitarra clásica y solfeo; para luego continuar con grandes capos de la guitarra eléctrica como Fito Gress y Ahmed Medina.
Su gran pasión por la composición se inició conjuntamente con el aprendizaje del instrumento. A los 6 meses de comenzar las clases ya creaba las primeras piezas.
