La trilogia Mamasan o las 3 puntas estrelladas de Pearl Jam

«¿Hay mitos sin una muerte trágica y joven?». Así comienza El animal que inventó el Si, donde la literatura y la música se funden para transportarnos a una nueva dimensión. En este capítulo hablaremos con Julio César Galán de La Trilogía Mamasan o las 3 puntas estrelladas de Pearl Jam.

1 – La lección es larga y la noche, inmensa  

¿Hay mitos sin una muerte trágica y joven?

¿Se puede dejar en la leyenda un cadáver viejo?

¿Salvar un bonito cadáver sin usura y ni claudicaciones?

¿Se puede pisar la leyenda cuando

se sabe que el rostro es una encrucijada,

una arista de Hamlet y Segismundo,

una poda de costumbres e imperfecciones?

El pensamiento salvaje brilla un momento.

El pensamiento salvaje en la autobiografía

[y la quimera.

Keith Richards había grabado aquí. El mito es un círculo.

A veces la música sale del erizo de una emoción,

a veces una mini-opera sale del olor negro

[de una gasolinera.

(San Diego y el surf y el baloncesto,

algo tiene la música de canasta y oleaje).

A veces los soldados de la mama-san

se miran en los ojos de un perro perdido

(también “El templo del perro”, el tributo a un amigo-el hombre

de las palabras doradas dice
[HOLA al cielo.

2 – Vive antes de comerte vivo

El equilibrio entre los extremos

o extremar los límites. Vivir es crear.

La fuerza brutal de la expresión-“Alive”-, la muerte del padre,

la mentira del padre

“Pero todavía estoy vivo”. Acaba la canción
como si no acabara. La madre trueca

[el pene del hijo en del padre. La madre corta la conciencia del hijo.

[¿Pero todavía estoy vivo?

Ya no se puede volver al comienzo:

el amigo no volvió de la sobredosis,

el perro volvió con los ojos del soldado y la bala sueña…

el hijo piensa en el crimen y Eddie Vedder enciende “Once”.

La pista oculta o el maestro/esclavo.

Cinco contra el mundo

y el muchacho ora

y desciende las escaleras

y el verano indio es el yo.

Las pisadas y la marca del hierro en la carne.

En la carne quemada hubo sueños

[y otras vidas.

La canción y las invenciones del asesino

En las grandes canciones el oyente

siempre desconoce la letra,

pero sabe el porqué no puede salir de ella

y por qué la melodía succiona

[sus sentidos.

Los recuerdos desde la cárcel

son un perezoso colgado de la melancolía

y la locura del escenario

es la única forma de estar vivo.

¿Por qué parpadea toda mi vida

en estas canciones?

Valora este contenido

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0

Hasta ahora ¡no hay votos! Sé el primero en puntuar este artículo.

Ya que has encontrado útil este contenido...

¡Compártelo con tus seguidores y amigos!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *