Seguro que a todos los que aprendemos a tocar la guitarra nos ha pasado y es que nuestros dedos no responden tan rápido como queremos.
Recuerdo al principio que en mi mente tenía claro cada nota, cada acorde, cada traste y cada cuerda, pero cuando me ponía a tocar mis dedos eran tan torpes que no daba ni una.
Cómo tocar más rápido la guitarra
Aprender a tocar algo nuevo en la guitarra, ya sea tocar algo lento para ir aprendiendo o simplemente tocar más rápido cuando ya has alcanzado cierto nivel, requiere enseñar a tu cerebro para que éste mueva los dedos y aprenda los nuevos movimientos.
El claro objetivo es enseñar a tu cerebro para que puedas tocar más rápido sin pensar en ello, es decir, que lo hagas de forma automática. Este punto es muy importante, así que tendrás que tener paciencia.
Pero antes de que empieces, si el tema que vas a tocar es largo, lo mejor es que lo dividas en pequeñas piezas.
Si en tu caso estás empezando y has elegido un trozo de una canción, también puedes dividirla en pequeños trozos para tocar más rápido. Aprende cada parte de forma individual para que después, tocandolas todas juntas, suene el trozo de canción o canción completa.
Una vez tengas esto claro, ya puedes comenzar a entrenar a tu cerebro para tocar más rápido de forma, por decirlo de alguna manera, automática. Los comienzos son lentos, así que ten paciencia. Empieza a tocar a una velocidad lenta, para ello puedes ayudarte de un metrónomo. Si no tienes marca el tempo con el pie o bien busca en internet uno on-line.
Es muy importante y necesario a la vez, contar con un metrónomo para mantener el ritmo y tocar un tema en el tempo adecuado. Si no lo marcas, tu cerebro se acostumbrará a tocar fuera de tempo o de ritmo, y lo único que conseguirás es perder el tiempo y frustrarte, y asi no conseguirás tocar más rápido.
Ahora que ya cuentas con un metrónomo, ya puedes comenzar. Imagina que ya has elejido qué vas a tocar. Tienes las notas, sabes si en un 4×4, un 6×4, etc.
Pongamos por ejemplo que has elejido un parte de una canción con un punteo que va toda velocidad, en la que tienes que tocar más rápido, pero no sabes por dónde cojerlo. Bien, pues lo primero que vas a hacer es reducir la velocidad de ese trozo que has elejido y reproducirlo, es decir, tocarlo a un ritmo más lento.
Si cuando lo estés tocando te equivocas, para y comienza desde el principio. Recuerda que no debes eneseñar a tu cerebro a tocar mal. Con un par de veces que toques algo mal después te será más difícil corregir los errores.
Tus dedos tienen «memoria muscular» y han aprendido en qué posición debe estar cada uno en todo momento.
Practica y sigue tocando con el ritmo lento con el que has comenzado hasta que puedas tocar, bien el trozo o bien el tema entero, sin equivocarte. Cuando hayas llegado a este punto, tócala de nuevo, y otra vez y otra hasta que puedas tocarla sin errores al menos cinco veces.
Así es como enseñas a tu cerebro para que puedas tocar este nuevo patrón de notas. Tus dedos tienen «memoria muscular» y han aprendido en qué posición debe estar cada uno en todo momento.
Relájate y trata de no pensar en las notas de forma individual, sólo tienes que centrarte en ciertas notas, por ejemplo la primera nota del primer tiempo o del tercer tiempo, y después deja que tus dedos hagan el resto. Márcate como guía las notas que creas que son más importantes y que te van a ir marcando el resto.
Una vez hayas alcanzado este objetivo, ha llegado el momento de acelerar el ritmo. Ha llegado el momento de tocar más rápido, pero no demasiado.
Aún no ha llegado el momento de tocar a la velocidad real. Ve acelerando lentamente, sólo un poco. Ahora toca de nuevo la pieza a este ritmo. Si cuando estás tocando piensas en las notas de forma indivual es que estás tocando demasiado rápido. Para y empieza de nuevo.
Ante todo paciencia, tendrás que hacer varias repeticiones hasta que lo consigas. Repite el proceso de tocar a un cierto ritmo y guíate por las notas que te has marcado como principales (lo has hecho igual en el anterior proceso) y deja que tus dedos hagan el resto.
Cuando toques la pieza sin equivocarte puedes ir aumentando el ritmo y repetir el proceso hasta que llegues a tocar a la velocidad real del tema.
Practica poco a poco y conseguirás tocar más rápido. Cuando hayas superado este último paso, tu cerebro estará entrenado y podrás tocar sin equivocarte. Recuerda que puedes dejarnos tu comentario y si sabes de algún consejo más, añádelo.
Encontrarás más consejos AQUÍ.