Hextar es una novel agrupación oriunda de Venecia, Italia, que a mediados de abril lanzó uno de los descubrimientos más increíbles que ha dado el Heavy Metal subterráneo en la todavía primera mitad de este año: un EP homónimo con seis piezas, y labrado de manera totalmente independiente, sin el apoyo de ninguna disquera.
La agrupación está formada por Emiliano Zinà en el bajo, Andrea Feltrin en la batería, Marco Scattolin en la guitarra, y un increíble Edoardo Loreggian en la voz.
Quizás también te interese leer:
– Luzbel y su nuevo EP, El retorno a la obscuridad
– Timo Tolkki y su concierto más nefasto
– Enforcer sigue lejos de las grandes ligas
Cuatro músicos que han logrado un excelente sonido combinando las mejores cualidades de cada uno. Lo mejor es que en ningún momento esconden sus influencias, sino que utilizan los recursos del Heavy/Power en su máxima expresión.
El nombre de la banda viene de la unión de las palabras hex y star, la agrupación se basó en el precepto de que ver una estrella fugaz en el cielo puede ser presagio de que algo malo está por suceder.
Fue en 2018 cuando Marco, Emiliano y Andrea empezaron a cocinar la idea de armar una agrupación.
A nivel compositivo, Hextar brilla desde la primera pieza: «Faceless Dame», con un intro que vaticina desde el primer segundo que la guitarra será el hilo conductor de la melodía.
Su labor no es simplemente desatar riffs que acompañen las melodías de la voz, sino que también dibuja líneas sobre las estrofas, lo que le da a las canciones un gancho constante.
Es en esa misma pieza donde Edoardo Loreggian se presenta en toda su capacidad, dejando escuchar una voz luminosa, de tonos agudos que no se perciben forzados.
Aun en piezas donde no se le exigen notas altas, como «Heavy Words», su voz mantiene una tesitura agradable, que impacta sin necesidad de desgarrarse la garganta.
El bajo mantiene una función muy activa, tal como se puede apreciar en la introducción de «Heavy Words». La mezcla respetó su volumen, y es posible apreciar al instrumento como un contribuyente del ritmo.
Aunque no ofrece líneas ambiciosas, su labor es apenas justa para ser funcional a las canciones. Toda la melodía se la lleva la guitarra de Marco Scattolin.
Las letras destacan por ser muy extensas. El último miembro en entrar a la banda fue Edoardo Loreggian. Él mismo se encargó de escribir la letra de las canciones que ya estaban hechas, por lo que la cadencia de las líneas vocales llega a sentirse un poco forzado en ocasiones.
No abundan las rimas, y los estribillos se diferencian muy poco del resto de las estrofas.
La única canción que escribieron juntos fue «The Stand», y se puede notar desde los primeros versos un ritmo melódico que no se escucha en las demás piezas.
Esto abre una enorme posibilidad de composición para futuros trabajos, pues dicha canción es la muestra de lo que la banda puede lograr en conjunto.
La buena respuesta que han tenido de diversas partes del mundo los ha puesto en el foco como una de las promesas más interesantes de la escena italiana.
Actualmente, la agrupación junta recursos para poder lanzar el disco en formato físico. Mientras, ya están componiendo nuevo material para un esperado disco debut.
Más información sobre Hextar en los siguientes enlaces:
Facebook
YouTube