Lo nuevo de Dave Matthews Band, una oda emblemática

Walk Around the Moon es el décimo álbum de estudio de Dave Matthews Band, que fue lanzado el pasado 19 de mayo. En esta nueva entrega estaremos repasando el que se considera hasta el momento como una pieza maestra imprescindible en la nueva era de la banda.

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Lo nuevo de Dave Matthews Band, una oda emblemática

El álbum abre con la canción homónima Walk Around the Moon, una apertura exquisita con un riff blusero que Dave Matthews adorna con un falsete que se siente familiar, y, aunque desgastado por el paso del tiempo, le da ese toque íntimo y cautivador que logra encantar al oyente.

Del mismo modo, el ritmo de Dave Matthews Band no sigue una línea recta. El baterista Carter Beauford y el bajista Stefan Lessard logran enfatizar los lugares donde el grupo se desvía de un camino bien transitado, cosa que de seguro lo hacen de adrede al querer experimentar y salirse del concepto que ha logrado crear la banda durante tantos años, incorporando elementos nuevos a su música. Es lo que se siente claramente en este nuevo disco.

Tras ya casi tres décadas después de su carrera, los tres miembros fundadores restantes de Dave Matthews Band son profesionales experimentados que entienden que las desviaciones de la norma son significativas, y ésa es la clave para explorar el sonido de Walk Around the Moon.

Como muchos álbumes que han visto la luz este 2023, nació en parte del aislamiento por la pandemia, un período de reflexión en el que Matthews logró evitar la melancolía que se cernía sobre él durante los primeros años de la década de 2000.

Algunas de las perspectivas más brillantes de Walk Around the Moon se pueden atribuir a la inclusión de sacudidas deliberadas de positividad en el álbum, pero esos momentos no son tan profusos como lo que ya conocemos de Dave Matthews Band en sus trabajos más radiantes durante la década de los 90.

Tal vez gran parte de ello se debe a la ausencia del difunto LeRoi Moore (quien fue reemplazado por otro trompetista), y la salida en el 2018 del violinista Boyd Tinsley, vacante que ocuparía el teclista Buddy Strong, decisión que ayudó a cambiar el sonido central de la banda a uno más vigoroso y rítmico de lo que nos tenían acostumbrados. Definitivamente un cambio positivo que le inyecta nueva energía a la banda.

Madman’s Eyes es una canción enigmática. Los elementos de música árabe que incorporan logran transportarte directamente a un viaje por el Sáhara. El riff de guitarra progresivo le da un color especial que empata con la potencia de la voz que estalla en el coro y se te queda metida en la cabeza.

Looking for a Vein es el track que sigue, una canción tranquila con ese golpe de caja característico de los 90, que le da un aire muy relajante al escuchar. The Ocean and the Butterfly también es tipo balada, pero con un peso rítmico que le da bastante sentido y compagina bien con la melodía del saxo con la que introducen el tema. De hecho, te va llevando al punto de imaginar que vas atravesando el Misisipi.

It Could Happen me sonó a una mezcla agradable entre Genesis y Pearl Jam. Es íntima, y con esa voz grave que te logra estremecer, mientras que Something to Tell My Baby es una balada acústica que da esa sensación de levedad.

Entre tanto, After Everything es la típica canción con ese sonido orquestal tipo Big Band al que nos tiene acostumbrados Dave Matthews Band. Destacan los arreglos de vientos y los coros al estilo góspel, mientras que All You Wanted Was Tomorrow empieza relajada y va creciendo mediante un Groove que sube y baja al compás con la banda. El solo de trompeta le da ese aire jazz que nos encanta a los que seguimos desde hace tiempo a la banda.

La siguiente en la lista es la rocanrolera The Only Thing, una canción enérgica y alegre que le da un respiro y sensación de libertad, ideal para una playlist de carretera. El intermedio es un juego de solos entre el teclado y la guitarra, ese toque de jazz rock complementa bien con lo que Dave Matthews Band ha querido arriesgar en este nuevo álbum.

Sigue avanzando la música y llegamos a Break Free, para mí la canción con más Groove. Lo que ha hecho el bajo y la batería ha sido suficiente para que el resto de la banda vaya sobre ruedas. Otro ejemplo de ello es el evidente peso rítmico en un tema tan suave como Monsters, que a propósito es el mas reciente sencillo del álbum.

Finalmente desembocamos en un dulce desenlace con Singing from the Windows. La voz de Matthews muestra una evolución que suaviza y profundiza sus excentricidades de fraseo, otro elemento terrenal que le da a Walk Around the Moon una sensación de peso e inmediatez que es rara en el catálogo de Dave Matthews Band, pero muy justa, ya los fans lo estábamos esperando.

Como siempre agradecemos sus comentarios. Desde LaCarne Magazine estaremos atentos a las nuevas noticias que Dave Matthews Band nos traiga para este año.

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